Pero la temporada tenística 2010 comenzó, paradójicamente, el último día del año pasado. Cuando la mayoría de tenistas apuraban su pretemporada, el alicantino Ferrer (17º) y el ruso Davydenko (6º), se jugaban en los cuartos del torneo de exhibición de Abu Dhabi en los Emiratos Arabes el derecho a enfrentarse a Nadal (2º) en semis, y en un partido donde Nikolay parecía que iba tan lanzado como al final del 2009, el pundonor, la garra y la fe adquiridas por el español en la final de la Davis dieron la victoria a 'Ferru' en tres sets. No obstante, a pesar de demostrar en un reñidísimo primer set ante Nadal en semis que aún tiene tenis para complicar la vida a los top ten, sucumbió ante el empuje del manacorí.
En los otros cuartos, el sueco Soderling (8º) ganaba ajustadamente en dos tie-breaks a dos suizos: primero a Wawrinka con apuros, y después repetía mismo resultado pero con mejores sensaciones en semis ante Federer (1º) para vengarse de todas las derrotas, hasta 3 (Roland Garros, Wimbledon y US Open), que Roger le había endosado en 2009. Por tanto, en la final entre Nadal y Soderling se volvían a dar cita el morbo (tras la derrota de Roland Garros y la impotencia de la Copa de Maestros experimentadas por Rafa) y la insolencia del sueco que va camino de creerse muy mucho su papel de tenista estrella: aunque el duelo se decidió por mínimos detalles, el balear esta vez fué más contundente y en algo más de dos horas de partido derrotaba a Robin por 7-6 y 7-5, cerrando de este modo la puerta a los fantasmas que en la segunda parte de 2009 le llevaron a no derrotar a rivales punteros y a no ganar ningún torneo. Un torneo de exhibición era un primer paso en su retorno a la élite y aunque pudiera considerarse un campeonato de 'pachanga', el que lo ganó fué él, Nadal, y no Davydenko ni Federer, los dos cocos allí presentes.
La siguiente parada, ya oficial y con otros torneos también disputándose, iba a ser en otro torneo con carisma de mucha pasta en el ambiente, donde el vencedor del año pasado, el escocés Murray (4º), no era de la partida. El lujo qatarí de esta pasada semana permite a Nadal seguir rodándose y aumentando progresivamente su estado de forma de cara al inminente Abierto de Australia. Los rivales que se fué encontrando por el camino no eran nada consistentes para su tenis, como el belga Steve Darcis (122º) que se retiraba en cuartos cuando estaba recibiendo una paliza, o el serbio Viktor Troicki (29º), quien no pudo más que anotarse 3 juegos en semis. La historia decía que Nadal nunca había apsado de cuartos en este torneo pero este año iba lanzado y parecía que los pocos obstáculos que se estaba encontrando por el camino auguraban un nuevo triunfo del balear.
Por el otro lado del cuadro, Federer iba a tropezar en semis con Davydenko por un doble 6-4 en un partido efectivísimo del ruso, aunque antes batía en un buen enfrentamiento a tres sets al letón Ernest Gulbis (90º), un jugador que a ver si explota ya y demuestra las excelencias que los expertos en tenis le presuponen. Como muestra del nivel de las finales jugadas hasta ahora en 2010 por Nadal, si en Abu Dhabi tumbó a un top ten que le amargó en el 'Round Robin' de Lóndres, en Doha tenía la posibilidad de repetir la misma acción: Davydenko ya le había ganado fácil en el Masters de noviembre pasado pero este era un Rafa distinto, tanto que con el 6-0 y 5-3 en el marcador parecía que estaba dándole una paliza descomunal a Nikolay.
Pero este revivió y forzo la muerte súbita del segundo set, donde Nadal disponía de dos saques suyos para resolver con 5-4, pero Davydenko demostró porqué es Maestro: levantó este set y por 6-4 se llevaba el torneo qatarí. Y para que quede claro que en tenis la lógica y las matemáticas apenas sirven, una muestra: Ferrer ganaba sufriendo en tres sets a Davydenko en la exhibición de Abu Dhabi, Nadal tumababa bien en dos sets a Ferrer en la misma competición, pero Davydenko acabó ganando con autoridad a Nadal en al final de Doha. Pero ¿si Davydenko pierde con Ferrer, como puede ganar a un Nadal que ganó a Ferrer? Sencillo, así es el tenis, así de apasionante y voluble.
La globalización tan manida a principios de este siglo (un término bastante en desuso ya, parece que mola más hablar de cambio climático o calentamiento global) abarca también al mundo del tenis y hace que un país con enormes conceptos tercermundistas como India, posea un torneo ATP, de categoría 250 concretamente y denomiando el torneo de Chennai o Madrás. Iba a ser el torneo del retorno del mallorquín Carlos Moyá (ganador allí en 2004 y 2005), antiguo número 1 pero hundido en el ranking en el puesto 446 debido a una temporada inactiva por lesión, y 'Charli' cayó en primera ronda peleando hasta el tie-break del segundo set ante un duro hueso de roer, el serbio Janko Tipsarevic (38º), quien luego llegaría hasta semis, siendo solamente derrotado, aunque con holgura (6-1,6-3), por el campeón, el croata Marin Cilic (14º). En las otras semis, el israelí Dudi Sela (43º) vendía cara la final ante el suizo Stanislas Wawrinka (21º), quien por segunda vez esta temporada (ante Soderling en la exhibición de Abu Dhabi) perdía un duelo en dos apretadísimos tie-breaks ante un Cilic que con 21 años se encuentra ante la temporada de su confirmación.
Por último, hablamos del torneo que cronológicamente antes se disputó esta pasada semana. El ATP 250 de Brisbane, que el año pasado ganó Stepanek a un incipiente Verdasco, reunía a la suma de los mejores jugadores por ranking, con solventes cabezas de serie (en Doha solamente sobresalían Federer, Nadal y Davydenko, mientras que en India los cabezas de serie eran más bajos en ranking), como es el caso de los cuatro semifinalistas: el estadounidense Roddick (7º) frente al checo Berdych (20º) -donde Andy tuvo que remontar un mal set inicial para pasar- y el francés Monfils (13º) ante el checo Stepanek (12º) -donde el francés apenas se presentó en pista. La final entre Stepanek y Roddick resonaba a febrero de 2009 donde en apenas en un mes estos dos tenistas se enfrentaron en las semis y final de San José y Memphis, respectivamente, con un triunfo para cada uno, San José para el checo ante Fish y Memphis para el de Nebraska ante el de Karvina. Pero en Brsibane, donde Radek defendía corona, la igualdad predominante entre ambos se traslució en dos vibrantes tie-breaks que cayeron del lado de Andy finalmente.
La primera semana del año deja tres buenos torneos y, además de los tres ganadores, vislumbra las dinámicas e inercias de varios jugadores punteros. La segunda semana traerá otros dos ATP250, Sydney y Auckland, que servirán de rodaje y entrenamientos para el primer Grand Slam del año, el Abierto de Australia que comienza el día 18 de este mes. Y mientras, Djokovic (3º), Del Potro (5º) o Tsonga (10º) aún sin debutar y Murray (3º) solo con las pruebas de la Copa Hopman a cuestas.
Vaya lecciones de tenis que das en tu blog, amigo mío. O te gusta mucho o te empapas aún más de la materia para escribir las entradas. -O ambas cosas-. En fin es un placer leerte y entender un poco más este deporte.
ResponderEliminarAmbas cosas, primero imagino en mi cabeza lo que quiero decir, pero después contrasto los datos en esa inagotable fuente del saber que es internet o ma sbien google, para no colarme, porque como dijo iñako hay que ser precisos en los datos, sino el lector coge la sensación de que este no se entera y la liamos jejeje
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